El conflicto socio-ambiental a analizar se encuentra en el municipio de Cuetzalan del Progreso, Puebla, México, el cual es generado por los impactos que traería la extracción de minerales como el oro y la plata, así como la construcción de presas hidroeléctricas destinadas a suministrar energía a las compañías y procesos de minería en este territorio.
La Secretaría de Economía de México en los últimos 12 años, otorgó 2 concesiones mineras denominadas Atexcaco I y II, así como 4 concesiones para la construcción de 4 presas hidroeléctricas denominadas Ana, Conde, Boca y Diego. Estas concesiones se encuentran ubicadas en los municipios de Tlatlauquitepec, Yaonahuac y Teziutlán que colindan con el municipio de Cuetzalan.
Debido a la orografía y a la hidrogeología de la región, se vería afectada la zona sur del municipio donde se localiza la principal recarga hídrica que surte de agua potable a las comunidades del mismo.
Cuetzalan está amenazada por el establecimiento de dos actividades que generan graves daños al medio ambiente y a los recursos con los que cuenta esta población, la minería a cielo abierto y las hidroeléctricas. Dentro de los principales impactos al medio ambiente que ocasionan las mineras e hidroeléctricas son: Pérdida de la cobertura vegetal, modificación del sistema de acuíferos y cauces de ríos, erosión y sedimentación, contaminación del agua superficial y subterránea, del aire, del suelo – subsuelo y acústica, pérdida de biodiversidad entre otros.
Las dependencias de gobierno, solo pueden realizar las gestiones y autorizaciones necesarias para validar o evitar la instalación de las mineras o las hidroeléctricas. Por este motivo las mayores propuestas son generadas por las comunidades con todos los actores que los apoyan: la COTIC, las universidades e investigadores, las organizaciones civiles y al Comisión para el desarrollo de los Pueblos indígenas.
Algunas de las alternativas que se han propuesto en contra de los megaproyectos son:
- Realizar estudios de impacto ambiental, con el fin de identificar las afectaciones, modificaciones y pérdidas ambientales, sociales y económicas, específicas de la región que se generarían.
- Informar a las comunidades: Dar a conocer los resultados del estudio de para concientizar y sensibilizar a las comunidades de Cuetzalan y con esto construir un frente ciudadano de defensa del territorio Masehual.
- Presentar amparos y demandas: A partir de la generación del frente ciudadano en defensa del territorio Masehual, redactar documentos contra de las concesiones otorgadas por el gobierno a las empresas mineras e hidroeléctricas.
La minería afecta directamente la salud de la gente que trabaja en condiciones peligrosas y se expone a químicos tóxicos. También afecta la salud de la gente a través de los problemas sociales que origina. Los pueblos mineros y campamentos se desarrollan rápidamente con poca planificación y sin cuidado, lo cual generalmente causa muchos problemas. La riqueza súbita y la pobreza súbita que trae la minería generalmente está acompañada de mayor violencia contra las mujeres y los niños, el abuso a los trabajadores mineros por los dueños de minas y luchas por el control de los recursos.
La organización social ha sido siempre la respuesta para poder resolver problemáticas.
La organización social, estructurada y bien liderada, y lo más importante, a través de valores y sobre todo la cosmovisión de la gente local, lleva a soluciones integrales tomando en cuenta la opinión pública para poder construir un territorio basado en estos mismos valores bioculturales.
No hay acciones pequeñas que no modifiquen nuestro entorno ni el mundo. Las acciones deben ser siempre consensuadas entre los actores para lograr que la construcción del territorio sea a partir de lo que la gente que habita quiere para su propio entorno.
Más información en:
Análisis realizado por Felipe Murillo Arias, Adaliz Sayago Ortega y José Pàblo Fernández y Fernández.
Estudiantes del Máster en Ciencia y Tecnología de la Sostenibilidad de la UPC.
Imagenes extraidas de: municipiospuebla.com.mx